Las últimas semanas han sido vertiginosas acabando diferentes tareas, como recoger los detalles de boda con los que obsequiaréis a todos los invitados, seleccionar las canciones para bodas que sonarán en los distintos momentos del enlace o realizar la última prueba del vestido de novia para que te quede fenomenal. Ha llegado el día B, una jornada llena de nervios y emociones en la que queremos que disfrutéis por completo. Por eso te recordamos, futura novia, todo aquello que no se te debe olvidar en una celebración tan única y especial.
1. Darse el tiempo necesario para prepararse
Las prisas nunca son buenas consejeras. Así que tanto si vienen a casa los peluqueros y maquilladores como si vas a ir tú al salón de belleza, procura que esta cita deje el suficiente margen de tiempo por si se producen pequeños imprevistos, como cambiar el color del pintalabios porque te gusta más otro o que haya que trabajar más de lo esperado a la hora de dar forma a ese recogido con flequillo. ¡Seguro que estarás lista y eres puntual!
2. Caminar despacio y tranquila
Cuando te dirijas hacia el altar, todas las miradas estarán puestas en tu vestido de novia con escote ilusión, que la mayoría de asistentes descubrirá por primera vez. La tentación es acelerar el paso, pues la situación puede resultar algo abrumadora. Sin embargo, lo mejor que puedes hacer es respirar hondo y caminar relajada, a un ritmo pausado, disfrutando de un momento único en la vida. Recuerda, eso sí, probar unos días antes los zapatos de novia de color para que te resulten cómodos y se ‘hagan’ a tu pie.
3. Centrarse en la pareja novio
Ver a tus familiares y amistades te hará mucha ilusión, el oficiante estará dando el discurso y el fotógrafo (y el videógrafo si lo habéis contratado) estarán capturando todos los instantes que hacen único un día tan especial. Sin embargo, principalmente debes fijarte en tu pareja y ella en ti. Compartid miradas de complicidad, sonrisas, un apretón de manos… Os sentiréis reconfortados. Ya llegará el momento de estar con los invitados durante el aperitivo, el convite y la fiesta. Este momento es solo vuestro.
4. ¡Sonreír!
Lo habéis organizado todo con cariño y dedicación, prestando atención hasta el más mínimo detalle de las ideas de decoración para bodas. Sin embargo, puede surgir algún imprevisto. ¡Tranquila! Es tu día, un día único e irrepetible, así que céntrate solo en vivirlo y en disfrutarlo al máximo demostrando tu felicidad con una gran sonrisa. ¡El mejor secreto de belleza! Seguro que saldrás espectacular y radiante en todas las imágenes.
5. No preocuparse por pequeños imprevistos
Si bien hay parejas que cuentan con un wedding planner para la organización de su enlace y otras que lo contratan para que se encargue de toda la logística el mismo día de la boda, muchas otras optan por hacerlo todo ellas. Si es vuestro caso, no sientas la tentación de preguntarlo todo, como si ha llegado el atrezo que formará parte de las ideas para el photocall. Deja que tus damas de honor o amigas más íntimas se encarguen de solucionar los pequeños problemas que puedan surgir ese día. ¡Se mueren de ganas de ayudarte! Relájate y disfruta. ¡Todo tiene solución!
6. Comer
Los nervios, la emoción y las ganas de hablar con todo el mundo pueden impedirte comer durante el banquete nupcial. ¡Mira de hacerlo! Ni que sea dar pequeños bocados a cada uno de los platos para descubrir toda la intensidad de su sabor y cargar pilas de cara a la fiesta posterior. Y, por supuesto, picotea después algo en ese rincón con ideas para el candy bar que tan bien habéis preparado.
Lo más importante es que disfrutes al máximo de tu gran día, de principio a fin. Así que si durante el baile tienes que cambiar tus zapatos de novia de tacón por unas bailarinas, no lo dudes. Lo mismo que con el peinado de boda: puedes optar por un recogido elegante para la ceremonia y el banquete, y deshacerlo después para estar más cómoda y lucir más informal. ¡Va a ser un día realmente inolvidable!